Review - LA BELLA Y LA BESTIA

Luego de lo sorpresiva que fue EL LIBRO DE LA SELVA (asombrando por los grandiosos efectos especiales), y de la recién estrenada LA CENICIENTA, era cuestión de tiempo que la compañía del Ratón llevara en modo live-action a uno de sus clásicos, estrenada en 1991.

Una joven soñadora y romántica llamada Bella (Emma Watson) vive en una pequeña aldea junto a su padre, un inventor de artilugios, al que algunos consideran un anciano demente. Un día, su padre viaja a una feria para exponer sus inventos, pero se pierde en el camino y acaba en un viejo y misterioso castillo. Buscando cobijo y un lugar donde pasar la noche, el padre de Bella descubre que el señor de ese castillo es una horrible Bestia (Dan Stevens). Cuando se percata de su presencia, la Bestia le deja encerrado entre rejas.  

Bella, preocupada por su anciano padre, no duda ni un instante en salir en su busca. Cuando encuentra el castillo, Bella decide hacer un intercambio, y quedarse encerrada a cambio de la libertad del anciano. Durante su estancia, la protagonista conocerá a una serie de peculiares personajes que harán que se sienta mucho más cómoda. Además, poco a poco, irá conociendo la Bestia, y se dará cuenta de que, en su interior, hay un gran corazón. La joven se enamora de él, deshaciendo así el antiguo hechizo de la rosa...

La película está basada (altamente fiel) en el clásico animado estrenado allá por el 1991, por lo que la historia y todos sus argumentos presentes es ya conocida. Si bien la animada fue una maravilla que impactó al público (sobretodo al infantil), su traslado en live-action no sorprende del todo; su ritmo es lento y flojo, y los efectos quedan mucho a deber. Vemos a una Emma Watson fresca y cómoda en su papel, aunque en ciertas ocasiones un tanto forzada en sus gestos, por lo que el público se tardará un poco en encariñarse con ella (si es que existe un mortal que no pueda amar a Emma). Las secuencias musicales son un tanto vacías, y se apoyan demasiado del carisma de los personajes secundarios, y puede que muy pocos los disfruten.

El problema que tiene esta cinta es que es muy colorida, no renueva nada y todo ya fue visto. Eso sí, en la parte cómica del film toda la audiencia se reirá un rato. Tal vez unos cuantos giros argumentales y secuencias musicales con algo más de coreografía, el resultado habría sido distinto. Pero de momento, termina siendo un sabor amargo, y sólo se convierte en una simple opción para entretener a un público joven.

3 de 5 estrellas

"UN CLÁSICO DE DISNEY QUE NO RENUEVA NADA."

MovieFilms / Andres Carrera